La alegria de la comunidad se veia reflejada en cada una de las personas, que ansiosas, esperaban la venida un nuevo sacerdote a esta comunidad.
El documento del Arzobispado en el cual se asigna canónicamente esta comunidad con la función de Vicario señala, entre otras cosas, lo siguiente:
Que el neo-presbítero cultive la vida espiritual, ejercitándose en la oración. Deberá propiciar la formación permanente como lo proponen los documentos de la Iglesia.
Que el neo-presbítero se integre en la planeación, realización y evaluación de la pastoral de conjunto parroquial y diocesana, para que impulse la formación cualificada de los agentes laicos.
El Pbro. Luis Miguel, dio las gracias por tan calurosa bienvenida, y dijo sentirse en confianza, ante tal recibimiento de la comunidad, y asi mismo, se puso a disposición de todos.
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